La receta de cómo ser feliz, con tres ingredientes

Descubrir cómo ser feliz en tu vida, no es tan difícil como puedes pensar. No es un camino tan largo y no requiere realizar ninguna inversión a largo plazo. Tan solo requiere cuatro ingredientes fundamentales y el resto tan solo es pura decoración.

Tu vida es totalmente distinta a la de los demás, es por ello que nunca encontrarás ninguna fórmula mágica que te diga exactamente lo que tienes que hacer para conseguir algo, pero sin embargo, hay unas bases que todas las personas tienen y sobre las que deben fundamentar su vida si quieren enfocarla hacia el éxito y la felicidad.

Tu casa está sostenida sobre columnas y pilares base, que en realidad son los que soportan las adversidades y las cargas, y todo lo demás depende de lo fuerte que sean estas bases.

Tu vida está enfocada de la misma forma y es una construcción que podrá ser más o menos fuerte depende de qué ingredientes y materiales uses para fundamentar su estructura base.

Hay tres ingredientes que si los mezclas en tu día a día, inevitablemente te conducirán hacia una vida con tendencia hacia la felicidad y al éxito personal.

Y digo que te conducirán inevitablemente, porque de hecho, no podrás cambiar de camino a no ser que quites estos factores de ella.




-AMOR:

Esta emoción va mucho más allá de lo que todos creemos, ya que te hace aceptar y no negar, permitir y no desconfiar, y te une a determinadas personas, situaciones o cosas que influirán en gran medida de tu desarrollo personal.

Puedes querer estar con tu pareja o sin embargo querer ver el partido de fútbol, las dos cosas quieres hacerlas, pero depende de cual hagas, así serán sus consecuencias para tí y el resultado no es el mismo aunque el amor esté de por medio en ambas.

El saber y decidir a quien queremos y a quien no, a quien introducimos en nuestra vida y a quien eliminamos de ella, está basado en el vínculo que establecemos con ellas a través de este sentimiento.
Sólo cuando consigues rodear tu entorno de situaciones con las cuales te sientes bien y con atracción hacia ellas, es cuando empiezas a caminar en el verdadero camino de la felicidad.

-PROPÓSITOS Y OBJETIVOS:

No puedes decir que no sabes qué quieres alcanzar. Es como vivir atado bajo las cuerdas como una mera marioneta de la sociedad y el mundo que te rodea.

Moverse bajo tus propios principios se convierte en el motor de inicio hacia un futuro planteado y es un ingrediente básico si quieres alcanzar la felicidad.

No puedes ser feliz si no quieres nada en particular, ya que los deseos y los sueños y el cumplimiento de estos son los que te hacen sentirte bien contigo mismo, feliz de estar como habías querido.

No existe la felicidad caida del cielo, la que te vas a encontrar al revolver la esquina ni la que la suerte introducirá en tu vida, sino la que te dará por cumplir tus propósitos y objetivos.

Si no tienes a donde ir....¿para qué quieres un vehículo? 

Llevo muchos años caminando sin saber a dónde tenía que llegar, y esperando como un ingenuo que la felicidad entrara en mi vida. Sólo empecé a tenerla en el momento en que vi claramente cual era mi meta y lo cerca que estaba de ella.


-VERDAD Y SINCERIDAD CON NOSOTROS MISMOS:

Ante todo el ser realistas, afrontar lo que tenemos, nuestras capacidades y unirlas al planteamiento de nuestros propósitos y objetivos es lo que nos hace que no andemos en una realidad ficticia y con un futuro incierto.

He vivido momentos en mi vida en los cuales vivía de mis propias mentiras, me autoengañaba día tras día para motivarme a base de situaciones que no eran reales.

Después, tarde o temprano tenía que enfrentarme a ellas y tan solo podía hacerlo creando una mentira aún mayor que cubriera y solventara la anterior.

Así hasta que la bola explotó y descubrí cuanto tiempo había perdido de mi vida en algo que yo mismo sabía que no me llevaría a ningún lugar.

La verdad es una pieza básica y sobre la que tienes que construir tu vida en sí.

De nada sirve que maquilles aquello que ya huele mal, y si el remedio es limpiarlo, pues nos planteamos los objetivos en base a dicha verdad y no a camuflarla entre mentiras y falsedades.

Levántate cada mañana sin miedo a enfrentarte a nada, porque tu conciencia está tranquila de que lo que has hecho está bien fundamentado y sin miedo a que pueda ser abatido por pequeñas adversidades.


Ésta es una receta, (no mágica, sino real) de pocos ingredientes, fáciles de conseguir, que no cuestan caros y que te pueden dar un resultado exquisito de la noche a la mañana.....el maravilloso descubrimiento de cómo ser feliz