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9 de octubre de 2014

Usa tu inteligencia y hazte rico (1ª parte)

Pero no me refiero a la inteligencia que estás pensando, sino a tu inteligencia emocional (¿cuál si no?).

Son muchas las personas que buscan información en internet, acuden a expertos, compran libros, etc.... para, según ellos, encontrar la fórmula de hacerse rico (por cierto, si alguno la encuentra que me la pase).

La gran mayoría, son personas que se ven obligadas o forzadas por la situación en la que se encuentran. Momentos en sus vidas que conducen a la gente a buscar cualquier atisbo de información que les haga tener esperanzas de salir del pozo en el que se encuentran.
Esto es así, porque el ser humano, no consigue entender algo, hasta que le hace daño o experimenta dolor en su vida por ese motivo en particular.

Es una especie de masoquismo, en el que nos autolesionamos haciéndonos creer a nosotros mismos que lo que el mundo y la sociedad nos da, es lo correcto; que la educación que hemos recibido de nuestros padres es la correcta; que el esfuerzo que hemos realizado años y años de nuestras vidas, tienen que dar sus resultados........¡ nada más lejos de la realidad !

El que estés haciendo lo que todos hacen porque te han enseñado desde pequeño que eso es lo que hay que hacer, no tiene porqué darte resultados. Como mucho, te dará el mismo resultado que a los demás, o incluso peor.

¿Acaso piensas que las personas que se hicieron ricas lo hicieron haciendo lo mismo que hace todo el mundo?

Pero vamos a ir por pasos....

¿Qué significa "hacerse rico"?


Hace tiempo vi en las noticias un estudio que habían realizado, en el cual se ponía un límite mínimo (de dinero ganado, me refiero), en el cual una persona podía considerarse rica, media, normal o pobre.

Algunas veces no entiendo las estupideces que se suelen hacer y el tiempo y dinero que se desperdicia en tratar de buscar límites a lo que no lo tiene, y éste estudio, con todos mis respetos, es una verdadera estupidez.

Las vidas de las personas son individuales, por mucho que se quiera generalizar y cortar a todos bajo el mismo patrón, todos los seres humanos son distintos interior y exteriormente, con lo que cada uno responde a distintas formas y bajo distintas situaciones.

¿Te has planteado alguna vez cuánto deberías ganar para considerarte rico? 

Hay gente que morirá feliz si tiene una vida en la que gana la décima parte de lo que gano yo, y seguro que se consideraría rica si eso le sucediera, pero si nos vamos por ejemplo al presidente del gobierno, seguro que lo que yo gano, no le serviría ni para pipas. 

Ese es uno de los problemas básicos por lo que las personas no tienen más ganancias en sus vidas, y es simplemente porque no tienen ningún objetivo al cual llegar....¿quieres acaso considerarte una persona rica sin saber hasta dónde tienes que llegar?.

¿En qué influye mi inteligencia emocional con mi dinero?


Pues en mucho, o muchísimo.

La gente de hoy, quiere llegar a lo más alto, haciendo lo mismo que hace en la actualidad. Alcanzar la cima de la montaña, pero desde abajo, sentado en su silla sin moverse.

La mayoría de las personas tienen una dependencia emocional con la sociedad que les rodea. Una dependencia que les impide salir de su zona de confort, avanzar y explorar un poco más allá de su rutina diaria.

Todo ello porque tienen miedo a lo que les pueda pasar, puesto que no quieren perder lo poco que tienen.

Personas que siguen aguantando todo lo que les echen encima, por temor a que le quiten sus miserias. Gente que se siente anclada a su trabajo fijo, a su despacho, a su oficina, a su horario laboral, y sin embargo no son felices, ni tienen tiempo para vivir sus vidas.

No hay nada más estúpido que estar en un trabajo que no está dentro de tus deseos y sueños. Ahora me dirás que tienes que pagar, que tienes obligaciones y ese trabajo es lo único que te da de comer a tí y a tu familia.

Pues sí, pero no quieras entonces llegar a una meta y quedar el primero cuando ni tan siquiera te has preparado para correr.

Tienes lo que se llama "Una vida hipotecada".

Si quieres aceptar lo poco que tienes, lo que te mantiene con vida y ser un esclavo de tu sociedad, estás en todo el derecho a hacerlo y a defender tu postura, porque marionetas en este mundo hay muchas, pero únicamente podrás llegar a lo más alto, si te cortas los hilos que te manejan.

El miedo a perder y enfrentarse a una vida distinta, a problemas que puedan llegarte por abandonar lo que tienes, a fracasar o a no alcanzar los resultados que tú esperas, son los puntos débiles a los cuáles tendrás que enfrentarte y superar.

Piensa que si empiezas algo nuevo en tu vida, si decides dar un paso que te haga avanzar y emprender una vida enfocada en hacerte rico, tienes que lidiar con tu propio control emocional sobre las cosas que vas a abandonar, y que tendrás que solventar.

Imagina que decides crear tu propio negocio, invertir en algún proyecto, algo que te haga tener el estilo de vida que siempre has soñado, pero.........tienes como carga adicional el tener que pagar tu casa, tus gastos, alimentación, familia, auto, etc.... y eso, si no te preparas emocionalmente, puede hacerte que no consigas tus proyectos.

Existe una estrecha línea entre tus obligaciones y deberes como persona, y tus deseos y sueños.

En el momento en que permites que las cargas de tus obligaciones entren en el terreno de tus sueños, empiezas a perder motivación y deseos de seguir adelante. 

Los problemas y las cargas, tan solo están diseñadas para hacerte volver al camino rutinario, al camino fácil y al que todos recurren para sentirse bien con su mundo, pero no consigo mismo.

Una persona con inteligencia emocional, consigue hacer que sus objetivos y metas, se mantengan siempre a una distancia considerable de los problemas y las cargas, para que nunca influyan en éstos.

Cuando tienes una vida en la que lo hechas todo en una batidora y le das al "on", tan solo podrás recoger como fruto, una verdadera mezcla de sabores, que no te satisfarán y harán que se te quiten tus ganas de preparar nada más.

La realidad provoca reacciones en el ser humano. Estas reacciones provocan sentimientos y emociones en nosotros y dependiendo de ellos, tendremos un resultado u otro.

Nunca podrás hacerte rico si:

-Sigues haciendo lo mismo que haces ahora.
-Sigues siendo un esclavo de la vida que te rodea.
-Tus cargas y deberes, son mayores que tus deseos.
-No sabes definir y controlar lo que sientes.
-No tienes un objetivo fijado al cual quieres llegar.
-No creas tu estilo de vida perfecto, y no el que tiene todo el mundo.
-No sabes aceptar los problemas y enfocarte en darles solución.

Es que necesito dinero para ser feliz


Mentira. 

Eso es lo que tú piensas, porque así te han educado, así lo sientes y crees que el dinero compra las emociones o te conducen a sentirte de una forma u otra.

Seguro que ahora mismo estarás pensando que a pesar de lo que te estoy diciendo, tú seguro que serías feliz cobrando miles de euros al mes, teniendo varias casas y comprándote lo que deseas a diario.

Pero volvemos a la realidad, y ésta es que no eres rico, pero sin embargo piensas en el dinero como aquello que te dará la felicidad y que solucionará tus problemas. 

Estás creando una dependencia de lo que ahora mismo no tienes, por lo que se te hará mucho más difícil conseguirlo....¿me has entendido, verdad?.

Deshazte de los tópicos que todos tienen acerca del dinero y no pienses en su poder, sino en idear un medio para conseguirlo y hacerlo llegar a tu vida.

Si te das cuenta, aquellos que consiguen hacerse ricos, son los que en realidad nunca han visto el dinero como lo ven todos, sino que lo han tratado como una herramienta más en sus vidas, sin tópicos, sin leyendas, sin importarles lo que los demás digan, y sin darle excesivo poder para que nos maneje y controle.

Un inversor de la bolsa, tiene que tener control emocional sobre lo que le va sucediendo a su alrededor, porque el dinero para él es un medio para alcanzar objetivos marcados, y si pierde, simplemente aprenderá de los errores e ideará una estrategia distinta al día siguiente, sin dejar que eso afecte a su forma de pensar y actuar.

Antes de pasar a la segunda parte de este post, me gustaría hacerte dos preguntas:

-¿Cuanto necesitarías ganar para sentirte una persona rica?
-¿Serías capaz de dejar lo que tienes ahora mismo para conseguir lo que siempre has deseado?

Sigue leyendo la segunda parte.
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Autor: Ying Yang


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