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20 de diciembre de 2015

Su peso en "caca". El valor de las opiniones de los demás a la hora de alcanzar tus metas

Pues así de sencillo y simple. Las opiniones que los demás tengan de aspectos de tu vida, simplemente valen su peso en "caca".

¿Por qué?

Porque son opiniones basadas en la propia perspectiva de esa persona, y no en la tuya.


Pero el ser humano es tan increíble, que las opiniones de los demás les influye tanto que llegan incluso a controlar sus vidas.

Hemos oído muchas veces eso de "respetar las opiniones de los demás", ¿verdad?. Pues de eso se trata, de respetarlas, que te entren por un oído, que te quedes con lo que te interesa de esa información y que tires por el retrete aquello que no te aporta nada.

¿Cómo debemos procesar la información que recibimos de nuestro alrededor?


Como lo que es....información.

No es una ley que haya que cumplir, ni mucho menos tiene porqué influenciarnos ni alterar nuestra perspectiva de las cosas.

Piensa que al igual que tú puedes estar equivocado sobre algo, también lo puede estar esa persona que te ha dado su opinión.

Pero claro, no sé porqué las personas valoran más lo que dicen los demás que lo que piensan ellos mismos.

Te encuentras a alguien y te dice que estás haciendo mal tu trabajo y automáticamente tu mente entra en duda consigo misma y empieza a cuestionarse si será cierto o no que estás haciendo mal tu trabajo.

Y entonces, replantea sus pensamientos y acciones en pos de tratar de hacer las cosas mejor, sin saber si las está haciendo bien o no, tan sólo por la simple influencia de lo que te ha dicho otro.

Esa forma de actuar, es un error.

No digo que no escuches lo que te llega de tu alrededor, sino que no te dejes influenciar por ello sin pasarlo antes por tu propio filtro.


¿Y si la persona quiere darnos un consejo?



Perfecto, aquí no estamos para desechar nada que nos ofrezcan.

Hay personas que se sienten sabias en algunos aspectos, y pueden darte algún tipo de consejo sobre cómo hacer mejor las cosas que estás haciendo.

Pero......¿sabes lo que significa probar?

Pues eso, prueba, comprueba y vuelve a comprobar.

La información en sí, siempre es muy valiosa, si la sabemos utilizar como lo que es en realidad, y no como veleta que haga cambiar nuestras metas y forma de pensar cada dos por tres.

Incluso puede que la persona que quiera darte su opinión sobre algo, tenga una perspectiva más acertada que la que tú tienes.

Eso está bien, si aprovechas esa información para mejorar aquello que tienes en mente y que estás haciendo.

El problema radica en que el 75% de las personas no tienen claro lo que hacen ni el porqué lo hacen.

Entonces llega una información que suena mejor y decides dar un giro de 180º a tu camino.

¡¡Error!!.


¿Por qué no es bueno dejarse influenciar por las opiniones de los demás?



Simplemente porque estás corriendo el riesgo de basar tu vida en las experiencias de los demás.

¿Y sabes que sucederá si lo haces?

Pues que te encontrarás en tu camino hacia tu meta, haciendo algo con lo que no estás acostumbrado ni te sientes cómodo y sin nadie a tu lado para que te guíe.

Porque aquel que te dice que algo está mal, no te va a ayudar ni lo vas a tener ahí a tu lado cuando no entiendas las cosas que te pasan.

La gente suele opinar, dejar su semilla de dudas en la mente de los demás y marcharse dejando sóla a esa persona para que ella se apañe.

Para resumirte esto, quiero ponerte un relato:

Había un anciano y un niño que caminaban hacia su pueblo junto a un burro.

Cuando pasaron por el primer pueblo, los habitantes empezaron a reirse de ellos diciéndoles: "Mirad que par de tontos, van caminando en un burro y ni tan siquiera lo aprovechan para montarlo. Por lo menos podría montarse uno de ellos".

Entonces el anciano se montó sobre el burro y siguieron caminando. Cuando llegaron al siguiente pueblo, la gente empezó a gritarles: "Parece mentira, mirad a ese anciano montado sobre el burro y dejando al pobre niño caminando".

Entonces el anciano se bajó del burro y subió al niño, y siguieron su camino.

Cuando llegaron al siguiente pueblo, la gente los vió y empezó a gritarles diciendo: "Qué desfachatez, el pobre anciano caminando y el niño tan tranquilo subido en el burro, parece mentira".

Viendo la situación, el anciano y el niño decidieron subirse ambos a la espalda del burro, y así siguieron su camino ambos a lomos del animal.

Cuando llegaron al siguiente pueblo, la gente empezó a insultarlos diciéndoles: "Sin vergüenzas, no hagáis sufrir al pobre animal con tanto peso. ¿Acaso no veis que lo estáis matando con los dos subidos sobre él?".

Entonces, el anciano y el niño decidieron cargar ellos con el burro a sus espaldas para que el animal no sufriera más.

Cuando llegaron al siguiente pueblo, la gente empezó a reirse de ellos diciéndoles: "Mirad que par de idiotas. Tienen un burro y en vez de montarse sobre él, prefieren cargarlo a sus espaldas. ¡¡Qué tontos!!".

El anciano y el niño, estaban tan decepcionados que no sabían qué hacer para afrontar las críticas que les caerían en el siguiente pueblo, así que decidieron sentarse a la orilla del río y pensar.

Cuando miraron al agua, entendieron que desde el principio, su camino había sido el mismo, y los únicos que lo habían recorrido habían sido los tres, el anciano, el niño y el burro.

No había nadie más en su camino ni ahora mismo junto a ellos, pero sin embargo el peso de las opiniones de los demás había influenciado demasiado su trayectoria.

Seguían igual que empezaron, solos y sin nadie a su lado.

¿Por qué debían sentirse tan mal y porqué estaban tan preocupados por cruzar el siguiente pueblo?

Vemos que el principal obstáculo que se encontraron, no fue más que la opinión de los demás y ¿sabes qué hizo eso? que dificultó y ralentizó el que llegaran a su meta.

Igual puede pasarte a tí si dejas que la opinión de otros influyan demasiado en tu perspectiva y forma de ver las cosas.


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