Parece como si la realidad que nos rodease fuera algo intocable, algo que no se puede cambiar ni alterar por ningún motivo.
Es como si estuviésemos condenados a conformarnos con aquello que nos ocurre y tan sólo tuviéramos la capacidad de adaptarnos a ello.
Pero, ¿sabes que la realidad de lo que te está ocurriendo es infinita? ¿Sabes que puedes crear aquella realidad que tú deseas si sabes cómo hacerlo?
Te pondré un ejemplo.
Imagina que te pones delante del espejo antes de meterte en la ducha. ¿Qué imagen ves de ti mismo?
Puede que veas a esa persona gorda que lleva ya mucho tiempo intentando ponerse a dieta pero que no lo consigue y lo único que hace es engordar día tras día.
Pero puede que también veas a esa persona que no está gorda, sino más bien "rellenita" que no se pone a dieta nunca porque tampoco lo ve tan necesario.
O incluso puede que veas también a esa persona que tan sólo tiene unos kilitos de más, pero a pesar de todo, esos kilitos lo hacen super atractivo y no ve necesidad alguna de ponerse a dieta porque le encanta la forma que tiene su cuerpo, con sus curvas y todo lo demás.
¿Cuál de esas imágenes sobre ti mismo es la real?
Pues la buena noticia (o la mala, depende), es que todas lo son.
Y no solo eso. Además de esas tres imágenes sobre ti mismo, existen un abanico infinito de posibles imágenes comprendidas entre ellas, todas dependientes de tu forma de ver y apreciar la realidad.
Dependiendo de la forma en la que te veas, así te comportarás y así serán tus pensamientos.
¿Puedes cambiar esa forma de verte?
Por supuesto que si.
Y no solo eso, sino que además cuando lo haces, conseguirás que tu realidad cambie por completo.
Porque ya no estarás viendo lo que ves siempre y te incomodaba tanto, sino que estarás viendo otra versión totalmente distinta de ti.
¿Y con eso cambiará mi realidad?
Cambiará tanto si quieres como si no.
Tu realidad está compuesta de muchas cosas, no solo de cosas materiales. De hecho, lo material que te rodea igualmente cobra la forma que tú quieras darle.
Por tanto, si aprendes a verte de una forma distinta, no tendrás más remedio que sentirte de una forma distinta.
- Y cuando te sientes distinto, piensas distinto.
- Y cuando piensas distinto, generas emociones distintas.
- Y cuando generas emociones distintas, experimentas acciones distintas.
- Y acciones distintas, es sinónimo de realidad distinta.
Te pongo otro ejemplo.
Imagina que estás acostado en tu cama tranquilamente y te sientes mal recordando la discusión tan fuerte que tuviste con tu hijo esta mañana, en la cual le gritaste y castigaste durante todo el día.
¿Cómo te ves a ti mismo en esa escena de tu vida?
Puede que te veas como el padre horrendo y cruel que le ha gritado a su hijo haciéndole perder la poca autoestima que le quedaba y castigándolo sin que apenas el niño pudiera haber comprendido cuál había sido el problema.
O puede que te veas a ti mismo como el padre paciente y bondadoso al cuál su hijo consiguió agotarle la paciencia que tenía debido al mal día que había tenido en su trabajo y a lo cansado que se encontraba por esforzarse tanto en su día a día para darle lo mejor a su familia.
En una imagen te ves como malo y en otra no tanto.
En una no tienen justificación tus actos y en la otra sí que pueden tenerlo.
Dos visiones distintas sobre una misma realidad.
Deberíamos decir mejor, dos realidades distintas en función de tu propia visión.
- Dependiendo de cual sea tu imagen de ti mismo en esa situación, te sentirás mejor o peor.
- Y dependiendo de cómo te sientas, pensarás de una forma u otra.
- Y dependiendo de esa forma de pensar, generarás emociones positivas o negativas.
- Y en función de esas emociones, harás unas acciones u otras.
¿Ves como todo cambia dependiendo de cuál sea tu visión y tu enfoque?
¿Y cómo cambio la forma de verme a mi mismo?
Para verte de una forma distinta, tienes antes que destruir la forma en la que te ves ahora mismo.
No pueden provocarse ambas imágenes a la vez.
O te ves de una forma o te ves de otra.
Pero aprender a desprenderte de esa visión de ti mismo que tienes ahora, no es una tarea fácil.
De hecho es algo complicado si no sabes por donde empezar. Porque a todos nos enseñan a aprender, pero no a desaprender.
Pero un buen paso para empezar este proceso, es aceptar que es posible crear la realidad que tu desees en función de tus pensamientos.
Te guste o no, tu vida depende de aquello que piensas y sientes.
No tienes porqué conformarte con aquello que te ha tocado vivir, porque como te acabo de demostrar, puede que eso tan malo que ves en tu vida, en realidad tenga una perspectiva distinta y buena que tú no seas capaz de ver.
¿Por qué?
Porque te empeñas en seguir viendo las cosas de la misma forma.
El destino lo creas y moldeas tu en función de cómo quieres crearlo.
Y cuando aceptas que esto es posible, aumentan tus probabilidades de que lo consigas.
Porque cambiar la visión que tienes de ti mismo es difícil, pero si nunca decides intentarlo, te resultará imposible.
Es lo que hace la mayoría de las personas.
Critican y juzgan sin tan siquiera haber probado antes si lo que leen funciona o no.
El desconocimiento hace que intentes cosas sin saber cómo hacerlas y que emitas un juicio en función de ese desconocimiento.
Pero que tú no puedas hacer algo, no quiere decir que nadie más pueda hacerlo.
¿Te gustaría empezar a tener una visión distinta de ti mismo y empezar a cambiar tu realidad de forma radical?
Yo te ayudo. Contacta conmigo y explícame tu problema.
Soy muy antipática me gustaría cambiar ,pero no puedo algún consejo?
ResponderEliminar¿Qué te gustaría caerle mejor a la gente, o caerte mejor a ti misma?
EliminarPara lo primero, hay un libro muy bueno que puedes ver aquí: https://www.amazon.com/dp/B00NPLO976
Para lo segundo, comentarte que no es tan fácil cambiar, hasta que uno no se propone a ello. Precisamente al final de este post te dejo una oportunidad para que puedas realizar ese cambio si tú quieres. Tan sólo deja tu email y poco a poco irás aprendiendo a ser una mejor versión de ti misma o a eliminar aquellas partes de ti que no te gustan.
Un saludo y gracias por comentar.