Pues sí, en el arte de la seducción, también existen los que utilizan la inteligencia emocional, y por cierto.....son los que obtienen mayores beneficios.
Fases de la seducción
Existen varias fases por las que pasa un proceso de seducción:
La sensitiva: En la que intervienen los sentidos de ambas partes. En esta fase, cobran importancia aspectos como el físico, la apariencia exterior, la vestimenta, el maquillaje, el estilo, etc....
Es una fase pura de atracción física.
La intelectual: En la que empiezan a intervenir el conocimiento de la otra persona por medio del lenguaje, las palabras, etc... Es la típica fase en la que resulta difícil establecer una relación con la primera, y es por esto que en esta fase, es donde se producen mayores desengaños.
La del verdadero yo: En la que entran en juego las actitudes y caracteres de ambos.
A pesar de lo que se puede leer y escuchar por ahí, el arte de seducir, no tiene reglas específicas, ni ninguna ley universal por la cual haya que regirse para que funcione.
Todos somos diferentes, por lo que resulta verdaderamente difícil establecer un principio que funcione para todos por igual.
Sin embargo, todo en este mundo está regulado por unas bases, unos principios básicos y esenciales que hacen que podamos tener éxito en aquello que nos propongamos.
Y en la seducción, se resume en tratar de conocer lo máximo posible de la otra persona, para atraerla a nosotros ofreciéndole lo que a ella le interesa.
La inteligencia emocional para atraer a los demás
La parte emocional de nuestro cerebro, funciona mucho más rápido que la parte intelectual, y lo plasma todo mediante emociones y sentimientos. De ahí la dificultad de poder definir y expresar con palabras aquello que sentimos.
Dentro del arte de la seducción, al igual que cuando tratamos de influir en las personas de alguna forma, el éxito está casi asegurado, cuando le damos a esa persona aquello que ella necesita.
Si te molestas en investigar y conocer a una mujer que te gusta y te propones el darle lo que ella necesita y busca en su vida, tienes un grandísimo porcentaje de que lograrás despertar su atención y por tanto, iniciar su atracción.
El problema de esto radica en que empezamos a entrar en conflicto con nosotros mismos, al tener que reprimir nuestra verdadera forma de ser, porque no coincide con lo que la otra persona desea.
Una persona es capaz de contener sus emociones, sentimientos y su auténtico carácter, durante un periodo de tiempo, pero, a la larga, esto supone una carga demasiado pesada y convierte la vida de esa persona en un camino de hipocresía, que acaba cansando.
Sería algo así como darle a la otra persona lo que busca y necesita en su vida, sin faltar a tus propios principios y amor hacia tí mismo.
Pero claro, esto ya no es tan fácil como hacer el teatro en las primeras citas para impresionar a la persona que tienes delante.
Gestionar y administrar lo que sientes, de modo que no interfiera en gran medida en tu propósito.
Pero el control emocional no supone solamente el controlarte a tí mismo, sino también el hacerlo con los demás.
Se trata de aprovechar lo que conoces de la otra persona, para darle aquello que la haga sentir bien.
Fomentar los sentimientos de los demás y usarlos para un propósito.
No se trata de manipulación, sino de sacarle todo el partido posible a lo bueno que sabes de alguien, y desechar e impedir que salga a la luz, lo malo que te pueda entorpecer tu avance.
Cuando te centras en captar la atención de alguien usando a esa persona y no a tí mismo como "cebo", es cuando puedes empezar a tener éxito.
No se trata de ponerte guapo para que muchas chicas se fijen en tí (todavía hay ingenuos que creen que así tendrán éxito), sino más bien en resaltar lo que a una chica le gusta para hacerla sentir bien a ella y de ese modo, dirija su atención hacia tí.
El propósito es el mismo, pero la forma de actuar ya no lo es.
Errores fatales en cuestiones de seducción
-Los prejuicios y el tratar de buscar la pareja perfecta para tu vida.
A veces las personas se ponen moldes demasiado perfectos de cuál sería el hombre o la mujer idónea en su vida, sin darse cuenta de que se están basando en prejuicios y suposiciones sobre alguien que realmente no conocen ni han podido probar.
La pareja perfecta no existe, bueno sí, en tus sueños, pero solo eso.
La pareja perfecta no existe, bueno sí, en tus sueños, pero solo eso.
-Creer en el amor a primera vista.
Aquí no hemos hablado todavía del amor, porque eso ya es un tema algo distinto.
Existe la atracción, el gusto físico, sexual o como quieras llamarlo, pero lo que se dice amor a primera vista, existe, pero no es real.
-Los miedos y los bloqueos mentales.
Cuando dejas que tu mente empiece a maquinar sin control, estás dejando que todo ocurra a una velocidad mucho mayor de la que puedes llegar a controlar.
Hay personas que temen ser rechazados, tienen miedo a no caerle bien a los demás, a no gustarle a esa persona, a decir algo inapropiado en el momento inadecuado.
Claro que todo eso puede pasar, pero es necesario que pase, porque si empiezas a darle importancia antes de que ocurra, el miedo que tú mismo te has creado te bloqueará mentalmente e impedirá que seas tú mismo, con lo que aumentará las probabilidades de que pase lo que te estabas imaginando.
Si no le gustas físicamente a alguien, por mucho que hagas, eso no cambiará los gustos de esa persona. Lo único que conseguirás comiéndote la cabeza, es que aumente tu miedo y empeore tus resultados.
Si dices algo que está fuera de lugar, lo hecho....hecho está, y no porque te pases todo el día pensando en ello, vas a volver al pasado a deshacer lo que ya hiciste. La impresión ya la causaste, más bien céntrate en que no vuelva a ocurrir.
-Tópicos y leyendas.
Te vuelvo a repetir que el ser humano es diferente en todos sus aspectos.
Lo que te guste a tí, no tiene porqué gustarle a los demás, y es por ello por lo que nadie puede decirte ninguna regla universal que funcione con todo el mundo por igual.
Existen muchísimos tópicos y leyendas sobre la seducción, pero no quiere decir que sean normas infalibles.
Más bien utiliza tu mente para individualizar lo que quieres, centrarte en analizar y conocer a la persona que tienes delante, sin basarte en lo que dicen, en lo que has leído, en lo que has escuchado de "seductores natos".
Cada persona es un mundo, con sus gustos, pensamientos y forma de ser y actuar, y ese conocimiento no lo tiene nadie.
Ya has visto cómo las inteligencia emocional se convierte en una herramienta verdaderamente práctica y útil en muchos, o casi todos los aspectos de tu vida. ¡¡No la desaproveches!!.
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