Reglas para fabricar un día de felicidad

No es para nada difícil el fabricar un día en el que reine la felicidad y podamos llegar a la cama sintiéndonos verdaderamente llenos de lo que hemos hecho y su propósito  y fin.

-Cuando suene el despertador, no des tiempo a tu mente a pensar.....levántate sin ni tan siquiera esperar un segundo para que tu subconsciente empiece a quejarse.

-No empieces a vestirte pensando todo lo que tienes pendiente de hacer en ese día. Céntrate en lo primero que vas a hacer y vuelca tus pensamientos en hacerlo. Enfoca un solo objetivo y empieza su desarrollo.

-Dependiendo de la motivación con que empieces tu día, así podrás continuarlo. Es aconsejable no empezar la mañana con tristeza, porque de ser así, acabarás el día peor.

-Dúchate, báñate y empieza tu mañana como si fuera el mejor momento de todo el día. Eso te dará energía y fuerzas para poder sobrellevar el resto. Está comprobado que las personas que suelen hacer ejercicio por las mañanas, suelen llevar un día con mucho menos cansancio, menos estrés y menos angustia, con más fuerzas y con una energía más constante.

-Acostúmbrate a alimentarte en una escala inversamente proporcional, es decir, cuanto más debes comer será por la mañana, un poco menos al medio día y muy poco por las noches. Eso te ayudará a equilibrar la alimentación con los momentos en que más energías necesitas.

-La dosificación de la energía también debe ser de la misma forma que la alimentación, es decir, debe ir decreciendo a medida que el día va llegando a su fin. No guardes energías para la noche cuando en realidad la puedes necesitar por la mañana.

-Antes de salir al exterior, cúbrete con el escudo de tu propia iniciativa. No dejes que el estado del día altere e influya en tu forma de sentirte. Si está lloviendo o con fuerte viento y tormentas, no tiene por qué hacerte frenar tu fuerza y energía interior.

-Evita los parásitos e inercias de la sociedad y el mundo que te rodea. Que nadie te quite el timón de tu propia vida, y si tienes que equivocarte alguna vez, mejor que sea habiendo seguido tus propios instintos y tu propio camino y no el de los demás, en el cual también te equivocarás.

-Mentalízate en tener siempre un día que te aporte algo nuevo al día anterior y que te de una sensación un poco mejor que la que tuviste ayer.

-Mantén una rutina basada en la ausencia de esta, es decir, procura siempre hacer cosas novedosas y que te aporten sensaciones nuevas y mejores, pero basadas en la constancia que te aporta el llevar un modelo de vida algo más disciplinado.

-Si tienes que enfrentarte a algo que no te agrada, simplemente cierra los ojos, cierra tu mente y camina hacia ese objetivo. No dejes los problemas para después, o se te acumularán influyendo negativamente en tu energía y tu motivación.

-Cuando el día termine y estés en la cama, no llenes tu mente de cosas malas que te han pasado o que te podrán pasar mañana. Simplemente llénate del sabor que tiene el saber que mañana te enfrentarás a lo que venga, y que no lo harás ahora mismo porque ya es de noche.

-Empieza por darle valor a tu día, antes de empezar a valorar tu futuro más lejano, porque de cómo te desarrolles hoy, serás mañana.


Muchas más cosas podríamos añadir, pero quiero con este resumen que entiendas lo importante que es fabricarte tu propio día, sacar de las cosas vanas y rutinarias de nuestra sociedad, cosas felices y que en verdad nos aporten algo valioso.
Tu mente es especialmente alérgica a las cosas negativas, con lo que trata de no perturbarte a tí mismo con cosas que ni siquiera han pasado aún.
Un día lleno de felicidad es tan fácil de fabricar, que si no lo haces es porque realmente no quieres, y ya ese es otro tema.
Autor: Ying Yang

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