Cómo conseguir que la gente te de lo que tú quieres

Hay una frase o regla esencial si quieres conseguir de la gente, aquello que tú deseas que te den, y es que recibirás de una persona en la medida en la que tú le hayas dado a esa persona lo que ella quiere.

Es muy sencillo, pero sin embargo, la mayoría de las personas parecen no ver la importancia de este concepto.

Si consigues darle a una persona aquello que realmente necesita y eso que le has dado le ha proporcionado valor, recibirás de esa persona, aquello que tú también quieres de ella.



¿Parece una tontería? Es por eso que no todo el mundo consigue tener éxito y alcanzar lo que se propone conseguir de los demás.

Por norma general, el ser humano suele dar siempre y cuando haya recibido antes, y es por eso que toman este concepto de forma errónea.

-¿Por qué voy a hacerle un regalo a mi mujer, si ella nunca me ha regalado ni ha tenido un detalle conmigo?
-¿Por qué voy a saludar a esa persona, si ella nunca me saluda?
-Si mi jefe reconociera mi esfuerzo, me preocuparía por esforzarme aún más.
-¿Por qué voy a darle una propina a ese camarero, si a mí nadie me da nada regalado?

¿Entiendes el porqué la gente nunca comprende el concepto básico de conseguir que los demás te den lo que tú quieres?

Primero se preocupan en recibir y atender sus necesidades y partiendo de ahí, se disponen a dar.......o no.
Es decir, si no recibes, no das, por lo que te podrías hacer la siguiente pregunta: ¿Vas a dejar en manos de la voluntad de una persona, el que puedas conseguir algo de ella?

Si realmente quieres conseguir algo de alguien, debes dar tú el primer paso y sembrar lo necesario, para después poder recoger.
Es igual que invertir; si no inviertes, no ganas.....es simple ¿verdad? Primero tienes que dar en la medida que quieres conseguir.

Pero hay que tener en cuenta la proporcionalidad, es decir, en la medida que consigas satisfacer las necesidades de alguien, así recibirás de ella.

No pretendas que con pequeños detalles por tu parte, conseguirás enormes gratificaciones, porque es cuestión de regla de proporcionalidad.

Dar mucho, para recibir mucho. Dar poco, para recibir poco.

El gran problema es que es muy difícil centrarse en ver lo que los demás quieren, sin perder la perspectiva de lo que tú también deseas.
Por tanto, el hombre tiene el gran impedimento de hacer algo sin que realmente vaya a esperar recompensa por haberlo hecho.
Es decir, difícilmente las personas hacen cosas por los demás de forma desinteresada y sin enfocarse en su propio beneficio, con lo que lo que antes parecía sencillo, vemos que puede no serlo tanto.

-¿Quieres que tu mujer sea más detallista contigo? Ablándale el corazón y muéstrale lo que te acuerdas de ella en base a los detalles que le das.

-¿Quieres que alguien te salude cuando nunca lo hace? Sin importarte su reacción, salúdalo todos los días y muéstrale que no es indiferente para tí.

-¿Quieres que tu jefe reconozca tu labor y tu esfuerzo en el trabajo? Esfuérzate cada día un poco más, hasta el punto de que tu empresa conozca quien eres y lo que haces por ella. Tu jefe lo notará.


Esta es la regla fundamental que tienen los grandes líderes y aquellos que consiguen que los demás hagan cosas por el. Un concepto básico e importante sobre cómo alcanzar propósitos y objetivos de los que nos rodean.

Autor: Ying Yang

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