Psicología profesional. El jefe en tu trabajo

Todos o casi todos tenemos un trabajo bajo las órdenes del que se hace llamar nuestro jefe, que representa una figura profesional a la cual se le deben rendir cuentas y lleva el control de tu ámbito laboral en beneficio de la empresa.
Aquí no vamos a hablar de cual es el papel de un jefe o superior en términos profesionales, sino cual puede ser su influencia a nivel personal.
Cada sector de nuestras vidas es distinto y a cada uno de ellos se le deben aplicar unas normas, objetivos, métodos y comportamientos, que pueden variar, aunque nuestra forma de ser y de pensar sea la misma.

El ámbito laboral es uno de los más polémicos y por desgracia influyen mucho a nivel personal en las vidas de las personas, cuando en realidad no debería ser así.
Tu jefe en particular, puede convertirse en un verdadero enemigo para tí, que puede llegar a hacerte imposible que mantengas un equilibrio entre tu trabajo y tu vida personal, y simplemente es porque ejerce una especie de manipulación aprovechándose de un vínculo muy potente.....tu trabajo (Te aconsejo que leas el post sobre el acoso laboral).
Ya vimos algo sobre el arte de la manipulación y cómo evitarlo, pero en este caso, es distinto y puede serte más difícil alcanzar una estabilidad emocional que te permita seguir con tus objetivos profesionales y personales.

Debes establecer muy claramente las líneas que separan tu trabajo y tu vida personal, tus amigos en ámbito y en el otro. Como consejo es que no los mezcles porque quieras o no, a la hora de que haya un problema o inconveniente entre tú y esa persona, influirá de forma doble, es decir, en los dos ámbitos. Si tu mejor amigo, por ejemplo, es tu jefe, corres un gran riesgo ya que tu esfuerzo será doble:

-Aunque te vaya bien, siempre te sentirás cohibido a expresarte libremente y mostrarle tus verdaderos pensamientos, por miedo a que tome represalias de algún tipo.

-Si caes en problemas o disconformidades con el, aunque lo consideres tu amigo, no podrás solucionar estos problemas de manera normal, sin que se vea afectado tu entorno profesional.

Trata por tanto de no mezclar ámbitos distintos de tu vida, ya que tu entorno laboral no está diseñado para que trates temas personales, y si lo haces estarás corriendo un riesgo innecesario.
Tu jefe no debe, ni tiene la obligación de conocerte personalmente, tu tipo de vida, tus emociones, tus gustos, etc....y si dejas que entre en este entorno, estarás ya dando posibilidades a que se produzcan interpretaciones por su parte que a lo mejor puede que no se basen exclusivamente en tu actuación profesional. Por ejemplo, te cuento el caso real de mi amigo que era un verdadero prodigio en su trabajo, su jefe estaba encantado con su rendimiento, con sus números y con su profesionalidad. Un día, mi amigo decidió invitarlo a almorzar a su casa para que conociera a su mujer y a su hijo, pero justo antes de empezar a comer, mi amigo y su esposa empezaron a orar y dar gracias a Dios por los alimentos. Su jefe le preguntó: "¿Acaso eres creyente?", a lo que mi amigo le respondió: "Sí, desde hace mucho tiempo".
Al día siguiente, en la oficina, empezó a notar que su jefe le hablaba con otro tono; se había establecido una especie de muro entre el y su superior debido a esa situación tan puntual en el almuerzo, y entendió que fue un error llevar a su jefe a su casa y darle a conocer su vida personal y sus creencias. El rendimiento en el trabajo era el mismo, pero su superior no lo veía ya desde ese punto de vista, lo que hizo que poco a poco la tensión se fuera acumulando en el ambiente laboral por culpa de un tema personal.

Estos casos son así, porque el hombre no es capaz de separar algunas cosas y discernir lo que le compete a un ámbito o a otro, ya que el inconsciente a veces ejerce mucha influencia, sobre todo en personas débiles de personalidad y carácter.
¿Es necesario entonces que un ambiente feliz se convierta en hostil por mezclar zonas que no deberíamos?.
Tu jefe es tu jefe y tú debes verlo como tal; si le das otra figura aparte de la que ya tiene, estarás poniendo en peligro o dificultando el equilibrio de tu día a día. En tu trabajo solo debes ser visto por lo que eres para la empresa, y no por lo que eres personalmente, con lo que tienes que aprender seriamente a separar todas las figuras que tienes en tu vida, colocarlas en su entorno correcto, y darles la importancia y el trato al respecto de dicho entorno y no más. Con esto te evitarás frustraciones y problemas innecesarios por detalles de no saber colocar cada emoción en la estantería correcta.

Autor: Ying Yang

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